Los guisantes son una excelente fuente de proteína vegetal para usarlos en la dieta de tu perro, junto a las judías verdes, el brócoli o las acelgas.
Cuando los preparo para mí, siempre hago para mis perros porque:
Son ricos en nutrientes esenciales:
- Contienen vitaminas del grupo B, como B1, B6 y folatos, que ayudan al metabolismo energético y al sistema nervioso.
- Son fuente de vitamina A, importante para la salud ocular, la piel y el sistema inmunológico.
- Aportan minerales como el hierro, potasio y magnesio, esenciales para la salud muscular y ósea.
Bajos en calorías y ricos en fibra:
Ayudan a mantener un peso saludable en perros con tendencia al sobrepeso.
La fibra mejora la salud digestiva, regula el tránsito intestinal y favorece la microbiota.
Son antioxidantes naturales:
Contienen flavonoides y polifenoles que combaten los radicales libres, ayudando a prevenir el envejecimiento celular y enfermedades crónicas.
Apoyo a la salud cardiovascular:
Son ricos en ácido fólico y otros compuestos que ayudan a mantener la salud del corazón.
Fáciles de digerir:
Cuando están bien cocidos y en cantidades moderadas, los guisantes suelen ser bien tolerados por la mayoría de los perros.
Y algo muy importante:
Cuando un perro sufre giardia, los guisantes, gracias a esa fibra y a las vitaminas del grupo B que contienen, ayudan a:
- Regenerar la mucosa intestinal dañada por la infección.
- Mejorar el tránsito intestinal y la calidad de las heces.
- Aportar nutrientes esenciales que un perro debilitado podría necesitar.
A continuación, puedes ver el vídeo donde hablo de ello:
Saludogs