Las sardinas en lata son una excelente opción para incluir en la dieta del perro.
Son una opción nutritiva y muy fácil de incorporar con múltiples beneficios:
Son Fuente de Omega-3: los ácidos grasos que contienen ayudan a mejorar la salud de su piel y a mantener su pelaje brillante. Además, son antiinflamatorios, perfectos para perros con problemas de alergias o articulaciones y son magníficos para mantener el corazón de tu perro sano.
Proteína de calidad: son ideales para fortalecer sus músculos y ayudar en la regeneración de tejidos, sobre todo si tu perro es activo o está en crecimiento.
Vitaminas y minerales esenciales: las sardinas aportan varias vitaminas, como la vitamina D, que es esencial para la salud ósea, y las vitaminas del complejo B, que apoyan el metabolismo energético y la salud neurológica. También contienen minerales como calcio, fósforo y selenio, que son esenciales para el sistema óseo y el sistema inmune.
Fáciles de digerir: son ideales para perros con estómagos sensibles o digestiones complicadas.
¡Ojo! Si tu perro tiene problemas hepáticos no se las des, porque en estos casos hay que evitar la proteína animal.
A continuación puedes ver un vídeo donde hablo de ellas:
Saludogs